Seguidores de Morales dejan en suspenso los bloqueos de carreteras en Bolivia
Los partidarios de Evo Morales mantienen en suspenso la reanudación de los bloqueos contra el gobierno de Bolivia, tras la tregua de 72 horas que habían declarado la semana pasada, según dijeron este martes líderes cercanos al exmandatario.
Morales también suspendió la huelga de hambre que inició el 1 de noviembre para presionar un diálogo con el gobierno de su exministro Luis Arce, dijeron a la AFP tres allegados al expresidente.
Muy activo en redes sociales, el líder cocalero de 65 años no se ha vuelto a referir ni a los bloqueos ni a su ayuno de protesta.
"Por el momento, no (se han decidido nuevos bloqueos)", dijo la dirigente campesina Juanita Ancieta, representante en Cochabamba del Movimiento al Socialismo (MAS), partido fundado por Morales.
"Hemos hecho una pausa para recargar energía en nuestra gente", agregó Ányelo Céspedes, diputado afín al líder cocalero.
Las protestas iniciadas el 14 de octubre pedían en principio el "cese de la persecución judicial" contra Morales, investigado por un presunto abuso a una menor durante su mandato (2006-2019), cargo que él niega.
Pero luego se transformaron en un reclamo contra el gobierno por la crisis derivada de la falta de divisas que ha agravado en el último año el desabastecimiento periódico de combustible.
Aunque los cortes de vías se levantaron, aún hay manifestantes que permanecen en las proximidades de tres cuarteles del Ejército en la zona cocalera del Chapare, en Cochabamba.
El gobierno afirmó el 2 de noviembre que 200 militares habían sido tomados como "rehenes" y que denunciaría a los responsables. El sector castrense no se volvió a pronunciar sobre la situación de los efectivos.
Los campesinos aseguran que no son tomas de cuarteles sino "vigilias" en las proximidades.
"Las vigilias continúan", confirmó Aquilardo Caricari, dirigente del MAS en el Trópico de Cochabamba. "Son totalmente pacíficas. En ningún momento se ha puesto en riesgo la vida de ningún elemento del Ejército", apuntó.
En medio de su disputa con Arce por el control de la izquierda en el poder, el expresidente acusa al gobierno de haberse aliado con jueces para impedir su candidatura presidencial en 2025.
(K.Müller--BBZ)