Los Ángeles, devastada por el fuego, espera ansiosa que amainen los vientos
La ciudad de Los Ángeles, devastada por vastos incendios en la costa oeste estadounidense, esperaba nerviosamente el miércoles que los fuertes y peligrosos vientos secos amainaran y dieran un respiro a los batallones de bomberos.
Los meteorólogos dijeron que el final podría estar cerca más de una semana después del estallido de los incendios, avivados por los vientos de Santa Ana, que provocaron al menos 25 muertos y arrasaron comunidades de las afueras de la segunda ciudad más grande de Estados Unidos.
Habrá "una gran mejora para esta noche y mañana, aunque todavía habrá algunas áreas donde la preocupación es persistente", dijo a la AFP Ryan Kittell, del Servicio Meteorológico Nacional estadounidense (NWS).
Partees del condado de Los Ángeles y del vecino Ventura permanecieron en estado de "Situación Particularmente Peligrosa", una designación oficial que estaba en vigor antes de los incendios mortales de la semana pasada.
- Numerosos puntos calientes -
Los incendios de Eaton y el de Palisades, que juntos han quemado más de 40.000 acres (16.000 hectáreas), seguían ardiendo el miércoles.
Batallones de bomberos de todo Estados Unidos, así como de otros de respaldo llegados de México, estaban trabajando para controlar los puntos calientes que aún podrían arder, dijo a los periodistas la jefa de bomberos de la ciudad de Los Ángeles, Kristin Crowley.
"Los vuelos con infrarrojos de anoche indicaron que todavía hay numerosos puntos calientes ardiendo dentro de la zona del incendio, y se prestó mucha atención para abordar cualquier brote rápidamente y evitar que el fuego se propague fuera del perímetro", resaltó.
Con decenas de miles de personas aún desplazadas de sus hogares por los incendios, la vida estaba lejos de ser normal en esa metrópoli.
Sin embargo los niños cuyas escuelas quedaron dañadas o aún están afectadas por órdenes de evacuación fueron acogidos en otras instituciones.
Caroline Nick, una ama de casa, llevó a Emery, de 11 años, y a Andrew, de 7, a la escuela primaria Nora Stery el miércoles después de que su propia escuela quedara destruida en el incendio.
El número confirmado de muertos por los incendios se mantuvo en 24, pero aún podría aumentar porque hay cientos de edificios por revisar.
- Pérdidas multimillonarias -
Más de 12.000 estructuras han sido demolidas, incluyendo casas de varios millones de dólares en el barrio de Pacific Palisades.
Las estimaciones del coste final de la tragedia ascienden ahora a 275.000 millones de dólares, una de las más costosas de la historia de Estados Unidos.
Las autoridades federales iniciadron una investigación para esclarecer las causas de los incendios, mientras surgen teorías sobre quién fue el responsable.
"Sabemos que todos quieren respuestas, y la comunidad merece respuestas", dijo José Medina de la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF), que asumió la tarea y prometió una "investigación exhaustiva".
El gobernador de California, Gavin Newsom, ordenó el martes que los equipos de remoción de escombros esperen ante posibles tormentas que podrían provocar deslizamientos de tierra.
Pero algunos vecinos de Palisades no se quedan de brazos cruzados y trabajan para retirar ellos mismos los escombros de calles y aceras.
El contratista Chuck Hart y su equipo estaban en un lugar de construcción en el vecindario cuando estalló el incendio.
Después de salvar de las llamas la casa de su madre, Hart dijo que comenzaron a hacer rondas para limpiar los escombros de las calles. "Haremos todo lo posible para que este lugar vuelva a funcionar lo más rápido posible", prometió.
(F.Schuster--BBZ)