Jugadores de la selección francesa prometen apoyo a una ONG de defensa de derechos humanos
Los jugadores de la selección francesa anunciaron el martes su intención de dar apoyo financiero a ONG que actúen "en la protección de derechos humanos" y recuerda su "compromiso" al "rechazo de cualquier tipo de discriminación" antes del Mundial-2022 de Catar.
En una "carta colectiva" publicada en redes sociales, los vigentes campeones del mundo reconocen "un contexto turbulento" alrededor de esta Copa del Mundo, que arranca el domingo: "Cada uno de nosotros debe asumir su parte" de responsabilidad, explican, uniéndose a otros países clasificados que ya se han manifestado sobre el asunto, como Australia o Dinamarca.
Los Bleus habían permanecido discretos hasta este momento en cuanto a sus posiciones sobre derechos humanos, asunto que ha despertado las críticas de ONG alrededor de este primer Mundial organizado en un país árabe.
"Nuestra pasión no debe ser la causa de la desgracia de algunos", insisten los jugadores del equipo francés, que se muestran "sensibles" a las "alertas de las ONG y asociaciones".
El apoyo financiero prometido por los jugadores de la selección pasaría a través de un fondo de una dotación bautizada Generación 2018, creado estos últimos meses por los campeones del mundo de 2018 y "destinado a financiar acciones con impacto social" que les importan.
Este anunció llegó horas después de que el movimiento juvenil del Partido Comunista Francés desplegara este martes una gigantesca remera frente a la Federación Francesa de Fútbol (FFF), en París, para "denunciar su silencio cómplice" sobre la organización del Mundial en Catar y el destino de los trabajadores migrantes.
Un puñado de miembros de la organización Jóvenes Comunistas (JC) trataron, con dificultad, de instalar su gran pancarta negra en la fachada de un edificio frente a la FFF, antes de desplegarla para que fuera legible.
"Catar 2022, FFF silencio cómplice y #PayUpFifa", podía leerse en esta remera gigante. La etiqueta hace referencia a una campaña de ONG que pide a la FIFA indemnizar a las familias de los trabajadores muertos en las obras.
Con un megáfono, el secretario general de JC, Léon Deffontaines, pidió la "dimisión" del presidente de la FFF, Noël Le Graët, afeándole su "mutismo cómplice".
"Es demasiado tarde para un boicot, pero queremos que el capitán (el arquero Hugo Lloris) lleve el brazalete LGBT y remeras de entrenamiento con mensajes a favor de los derechos humanos", dijo a la AFP.
El propio Lloris se manifestó el lunes al respecto, diciendo que tenía previsto "mostrar respeto" al país anfitrión, por lo que no parece probable que porte ese brazalete.
(G.Gruner--BBZ)