Alianza Quad rechaza "cambios por la fuerza", con China en la mira
Los líderes de Japón, India, Australia y Estados Unidos advirtieron el martes en Tokio contra los intentos de cambiar por la fuerza el statu quo de las relaciones internacionales, en medio de la preocupación creciente sobre la posibilidad de que China invada Taiwán.
Un comunicado conjunto de la denominada alianza Quad evitó mencionar directamente el creciente poderío militar chino en la región, pero dejó pocas dudas de cuáles son sus preocupaciones.
El documento, en lenguaje cauteloso, también aludió al conflicto en Ucrania, sin presentar una postura conjunta sobre la invasión rusa, que India se ha negado a condenar.
"Con la invasión rusa a Ucrania que sacude los principios fundamentales del orden internacional (...) confirmamos que los intentos unilaterales de cambiar el statu quo por la fuerza nunca serán tolerados en ningún lugar, en especial en la región de Asia-Pacífico", declaró el gobernante japonés, Fumio Kishida.
Junto al líder japonés participaron en la cumbre el presidente estadounidense, Joe Biden, y los primeros ministros de India, Narendra Modi, y Australia, Anthony Albanese.
"Nos oponemos firmemente a toda acción coercitiva, provocativa y unilateral que busque cambiar el statu quo e incrementar las tensiones en la zona, como la militarización de áreas en disputa, el uso peligroso de buques guarda costas y milicias marítimas, y los esfuerzos por interrumpir las actividades de explotación marítima de otros países", agregó el comunicado.
Horas después del final de la cumbre, Japón afirmó que aviones chinos y rusos volaron juntos sobre el mar de Japón y el mar del China Oriental, unas maniobras que Tokio calificó como "provocadoras".
"En un momento en el que la comunidad internacional responde a la agresión de Rusia contra Ucrania, el hecho que China efectuara este tipo de acción en colaboración con Rusia, que es el agresor, es un motivo de preocupación que no debe ser subestimado", dijo el ministro de Defensa, Nobuo Kishi.
Los cuatro países del Quad buscan convertir el grupo en un contrapeso al ascenso militar y económico chino, pese a sus diferencias.
Para ello presentaron un plan para invertir al menos 50.000 millones de dólares los próximos cinco años en proyectos de infraestructura en la región, así como una iniciativa de vigilancia marítima considerada como una forma de fortalecer el monitoreo de las actividades chinas.
Las iniciativas responden a la creciente preocupación regional con la actividad militar de Pekín, que incluye vuelos de aviones de combate, ejercicios navales y el asedio a barcos pesqueros.
- Democracia versus autocracia -
La alianza también se mostró preocupada por los esfuerzos chinos por forjar alianzas con países del Pacífico, como las Islas Salomón, que en abril firmó un amplio pacto de seguridad con Pekín.
El ministro chino de Relaciones Exteriores visitará esta semana las Islas Salomón y reportes de prensa indican que podría incluir a otros países como Vanuatu, Samoa, Tonga y Kiribati.
Ante ello, el primer ministro japonés urgió al Quad a "escuchar con cuidado" a los vecinos regionales, incluyendo las islas del Pacífico, "para ayudarles a resolver los desafíos inmediatos que enfrentan".
"Si no caminamos junto a los países de la región, el Quad no será exitoso", acotó.
El flamante primer ministro australiano Albanese también señaló que el bloque necesita "impulsar nuestros valores compartidos en la región en un momento que China claramente busca tener más influencia".
El Quad se reunió un día después de que Biden declaró que su país defendería a Taiwán frente a una eventual agresión China, lo que sugirió un cambio en la tradicional "ambigüedad estratégica" de Washington ante Taipéi.
Esta política, implementada desde que Washington cambió el reconocimiento diplomático hacia Pekín en 1979, consiste en que Estados Unidos se compromete a aportar medios de defensa para Taiwán, pero sin dejar claro si intervendría directamente.
El martes, Biden aseguró que "la política no ha cambiado para nada".
El portavoz del ministerio chino de Relaciones Exteriores, Wang Wenbin, acusó a Washington de apostar a un "juegos de palabras" con Taiwán.
"Si Estados Unidos sigue por el camino equivocado, no solo tendrá consecuencias irremediables para las relaciones sino-estadounidenses, también incurrirá eventualmente en un costo impagable para Estados Unidos", declaró.
Al inicio de la cumbre, el presidente estadounidense afirmó que "esto se trata de trata de democracias versus autocracias". "Tenemos que estar seguros de poder cumplir", agregó.
Los gobernantes del Quad tienen previsto reunirse nuevamente el próximo año en Australia.
(L.Kaufmann--BBZ)