Severodonetsk, a punto de caer en manos de Rusia en un conflicto que podría durar "meses"
Severodonetsk, una ciudad ucraniana clave en la región oriental del Donbás, está a punto de caer ante las tropas de Rusia, en un conflicto que podría prolongarse "varios meses", según Estados Unidos, que prometió enviar más armas a Ucrania.
"Los rusos controlan el 70% de Severodonetsk", aseguró Serguéi Gaidai, gobernador de la región de Lugansk. Según él, la ciudad está "destruida al 90%".
Los combates se libran de momento en las calles de Severodonetsk, una urbe industrial, informó el portavoz del ministerio ucraniano de Defensa, Oleksander Motuzianyk.
El jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, dijo que la guerra podría durar aún "varios meses" ya que Rusia no parece querer poner fin a su agresión.
Severodonetsk está en la región de Lugansk, que junto a Donetsk, conforma la cuenca minera del Donbás. Tras fracasar en el intento de tomar Kiev, la capital, Rusia centró su ofensiva en esta parte de Ucrania.
Ante el avance de las tropas rusas, el presidente estadounidense, Joe Biden, confirmó el martes el incremento de la ayuda militar a Kiev para poder "atacar con mayor precisión objetivos clave".
Un alto responsable de la Casa Blanca precisó que se trata de los sistemas Himars, que, sobre vehículos ligeros blindados, pueden realizar lanzamientos múltiples de misiles muy precisos, con un alcance de 80 km.
Estos equipos forman parte de una nuevo paquete de asistencia militar a Ucrania de 700 millones de dólares.
- "Leña al fuego" -
Tras el anuncio, el Kremlin acusó a Estados Unidos de "echar leña al fuego". "Estas entregas no alientan a los dirigentes ucranianos a relanzar las negociaciones de paz", reaccionó el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov.
Pero Blinken subrayó que Ucrania le dio "garantías" de que no utilizará los nuevos sistemas de misiles para atacar al territorio ruso. "Es Rusia la que ataca a Ucrania, no al revés", dijo.
Para algunos especialistas, los misiles Himars pueden alterar el equilibrio de fuerzas en el terreno, justo cuando el ejército ucraniano retrocede en el Donbás. Pero otros apuntan que las tropas ucranianas necesitarán tiempo para aprender a usarlos.
En lo que sí coinciden es que puede mejorar la moral de los soldados. "Si sabes que tienes armas pesadas, todos se animan", dijo un combatiente a AFP.
- ¿Referéndums? -
Sobre el terreno, periodistas de AFP vieron edificios destruidos en Sloviansk, al oeste de Severodonetsk, tras un ataque en el que murieron tres personas y otras seis resultaron heridas.
El miércoles, al menos una persona murió y otras dos resultaron heridas en Soledar, entre Sloviank y Severodonetsk.
Y un poco más al sur, los separatistas prorrusos afirman haber cortado una de las dos únicas carreteras que conducen a Avdiivka, situada cerca de Donetsk y que aún está controlada por Kiev.
Una victoria sobre esta ciudad le facilitaría a las tropas rusas la toma de Kramatorsk, localidad estratégica del Donbás aún controlado por Kiev, a unos 100 km más al norte.
Por su parte, oficiales occidentales de Inteligencia apuntaron que Rusia está registrando "ganancias progresivas pero bastante constantes", aunque, incluso después de tomar Severodonetsk, todavía quedarían "muchos más desafíos por delante".
Uno de los negociadores rusos sobre el conflicto en Ucrania, Leonid Slutski, dijo a la agencia de noticias Ria Novosti que los territorios ucranianos conquistados militarmente por Rusia podrían celebrar a partir de julio referéndums sobre una posible anexión.
- "Minimizar" el impacto del embargo -
Para apoyar a Kiev, la Unión Europea también ha enviado armas a Ucrania y ha adoptado sanciones económicas sin precedentes contra Moscú.
Esta semana, los líderes europeos acordaron un embargo parcial al petróleo ruso y los 27 también intentar reducir su dependencia al gas.
Pero el Kremlin aseguró que estaba tomando medidas para "minimizar" el impacto del embargo gracias a una "reorientación" de la economía.
El miércoles, el índice de producción industrial de Rusia pasó al terreno negativo por primera vez desde que empezó el conflicto, según cifras de la agencia estatal de estadísticas Rosstat.
Además, un comité de acreedores de la Asociación Internacional de Swaps y Derivados (ISDA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos afirmó que Rusia no pagó los intereses de una deuda, lo que la acerca aún más al default.
Para tratar de eludir las sanciones, Rusia también exige el pago del gas en rublos y corta el suministro a los países que se niegan a hacerlo. El miércoles, Moscú cortó el suministro a Dinamarca. También lo ha hecho con Países Bajos, Finlandia, Polonia y Bulgaria.
El gigante ruso Gazprom anunció que sus exportaciones de gas a países externos al exbloque soviético disminuyeron un 27,6% entre enero y mayo de 2022.
Las maniobras diplomáticas también se centran en desbloquear los puertos ucranianos en el mar Negro y permitir la exportación de los cientos de toneladas de cereales estancadas, que avivan los miedos a una crisis alimentaria mundial.
"¡Por favor, que no se use el trigo, alimento básico, como arma de guerra!", pidió el papa Francisco.
"Espero una victoria", dijo a AFP Andriy Veres, en las calles de Kiev. "Es muy importante para el país, para todo el mundo, para los que son aficionados de fútbol, pero incluso para aquellos que no lo son".
(A.Lehmann--BBZ)