Una activista saharaui llega a España para recibir cuidados médicos tras su arresto domiciliario
La activista saharaui por los derechos humanos Sultana Khaya llegó el viernes al sureste de España para ser tratada de las heridas sufridas durante 19 meses de arresto domiciliario impuesto por las autoridades marroquíes, indicó el grupo independentista Frente Polisario.
Su llegada se produce apenas dos meses después de que España terminara una larga crisis diplomática con Marruecos por el Sáhara Occidental, reconociendo el plan de autonomía de Rabat para esta antigua colonia española.
Conocida defensora de la independencia de este territorio disputado, Khaya estuvo en arresto domiciliario desde noviembre de 2020, junto a su madre y dos hermanas.
El viernes por la noche aterrizó en la ciudad de Alicante (sureste) procedente de las islas Canarias, adonde había llegado el 1 de junio tras recibir permiso para dejar su casa en El Aaiún, la mayor ciudad del Sáhara Occidental.
Abdulah Arabi, delegado del Frente Polisario en España, afirmó que la activista "está en Alicante donde tiene sus pruebas médicas", sin precisar cuánto tiempo se quedará.
Imágenes en redes sociales mostraron a una multitud recibiéndola en el aeropuerto con banderas y eslóganes independentistas y ululando de alegría.
En un comunicado, su equipo legal aseguró que había sufrido "incontables abusos de derechos humanos" durante su detención y que viajaba a España para recibir tratamiento médico.
"Fue violada tres veces por agentes de seguridad marroquíes (...) torturada repetidamente, amenazada de muerte y de desaparición", señaló.
Marruecos no comentó de inmediato su traslado.
Su situación fue reconocida por el departamento de Estado de Estados Unidos y organizaciones internacionales como el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos.
Amnistía Internacional dijo el año pasado que las fuerzas marroquíes "asaltaron repetidamente a Sultana Khaya, sus familiares y visitantes" con acciones que incluían la violación y el abuso sexual.
La oenegé añadió que la detención formaba parte de "una represión más amplia de las autoridades marroquíes" que se agravó con la ruptura en noviembre de 2020 de treinta años de alto el fuego entre ambas partes.
Marruecos considera este vasto territorio desértico, rico en fosfatos y recursos pesqueros en su litoral, como parte de su territorio, pero el Frente Polisario lucha por su independencia y reclama un referéndum de autodeterminación.
En abril de 2021, el líder de este grupo, Brahim Ghali, viajó a España para ser tratado del covid-19, un hecho que enfadó a Rabat y provocó una larga crisis diplomática resuelta recientemente con la aceptación por parte de Madrid del plan de Marruecos para el Sáhara.
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(T.Burkhard--BBZ)