Israel, a punto de disolver el Parlamento con miras a nuevas elecciones
Los diputados israelíes votan este miércoles la disolución del Parlamento, lo que pondrá fin al breve gobierno de Naftali Bennett, quien será reemplazado por su socio Yair Lapid hasta que se lleven a cabo, en el otoño boreal, las quintas elecciones en menos de cuatro años.
Bennett y Lapid marcaron en junio de 2021 un hito en la historia de Israel al lograr una coalición de ocho partidos (derecha, izquierda, centro), que incluía por primera vez una formación árabe, con el principal objetivo de poner término a 12 años ininterrumpidos de poder de Benjamin Netanyahu.
Pero un año más tarde, la coalición perdió su mayoría en la cámara y Bennett anunció la semana pasada su intención de disolverla para convocar nuevas elecciones.
Desde entonces, los rumores circulan en todos los sentidos. El jefe de la oposición, Netanyahu (Likud, derecha) intentó atraer a diputados de la coalición para formar un "gobierno alternativo" y así retomar el puesto de primer ministro sin pasar por unas elecciones.
Pero fue en vano. Un comité parlamentario autorizó el martes de madrugada un proyecto para disolver el Parlamento el miércoles, antes de las 23H59 (locales).
- Plazo in extremis -
¿Por qué este plazo? Los diputados quieren votar una serie de leyes antes de disolver el Parlamento, teniendo en cuenta que a partir del jueves una disposición que protegía a los más de 475.000 colonos israelíes que viven en Cisjordania ocupada expirará si el poder legislativo no se disuelve.
El 6 de junio, la oposición infligió un revés a la coalición de Bennett y Lapid tras reunir una mayoría contra la renovación de la "ley de colonos", una disposición que la cámara tiene que aprobar cada cinco años.
Esta ley debía ser renovada antes del 30 de junio, pues en caso contrario los colonos de Cisjordania --territorio palestino ocupado por Israel desde 1967-- corrían el riesgo de perder su protección legal en virtud del derecho israelí.
La disolución del Parlamento hace que esta ley se prorrogue automáticamente.
Bennett, ferviente defensor de estas colonias (ilegales según el derecho internacional), no podía correr el riesgo de entrar en una situación caótica y prefirió poner fin a su gobierno.
Si no hay sorpresas de última hora, el jueves, al día siguiente a la disolución del Parlamento, Bennett cederá su puesto a Lapid, actual jefe de la diplomacia israelí.
Su acuerdo de coalición incluía una alternancia en el poder y una cláusula que establece que Lapid sería primer ministro interino hasta la formación de un nuevo gobierno en caso de disolución de la Knéset (Parlamento).
"Lo que necesitamos ahora es volver al concepto de unidad israelí y no dejar que las fuerzas en la sombra nos dividan", declaró la semana pasada Lapid.
Este experiodista estrella ocupará a la vez el puesto de primer ministro y el de canciller, al tiempo que movilizará a sus fuerzas para las elecciones.
Será él quien recibirá a mediados de julio en Israel al presidente estadounidense Joe Biden en su primera visita a Oriente Medio desde su llegada a la Casa Blanca.
(Y.Berger--BBZ)