Las organizaciones humanitarias temen un aumento de muertes en el Mediterráneo
Tres organizaciones humanitarias que rescatan migrantes en el Mediterráneo solicitaron este miércoles a la Unión Europea (UE) que reanude las operaciones de búsqueda y rescate ante el temor que aumenten las muertes de migrantes que intentan entrar por mar al viejo continente.
SOS Mediterranee, Médicos sin Fronteras (MSF) y Sea-Watch han rescatado en los últimos días a más de mil personas que se encontraba a la deriva en barcos abarrotados de gente que zarpan del norte de África hacia las costas de Italia.
En una declaración conjunta, las organizaciones exigieron que "los Estados miembros de Europa y sus socios" proporcionen una flota adecuada para la búsqueda y el rescate de personas en el Mediterráneo central, que permita ofrecer una respuesta rápida y adecuada a todas las llamadas de socorro, así como un mecanismo de desembarco para los supervivientes.
La UE puso fin en 2020 a una controvertida operación contra el tráfico de personas en el Mediterráneo, reemplazándola con la Operación Irini, que se dedica a controlar que se respete el embargo de armas de la ONU sobre Libia.
Desde entonces, el rescate de los migrantes está a cargo de cada país, pero las ONG se quejan de que las autoridades de muchos de esos países ignoran los pedidos de socorro e incluso trabajan con las autoridades libias para devolver a los migrantes de regreso a ese país.
El Mediterráneo central es la ruta migratoria más peligrosa del mundo, una especie de enorme cementerio donde han muerto o desaparecido desde 2014 casi 20.000 personas, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
El barco Geo Barents de MSF transporta actualmente a 659 personas, entre ellos más de 150 menores y aún no se les ha concedido un puerto para poder desembarcarlos.
Ocean Viking, a cargo de SOS Mediterranee, desembarcó el domingo a 387 personas en el pequeño puerto turístico de Salerno, mientras que el buque Sea-Watch 3 desembarcó el sábado a 438 personas en Tarento, siempre en el sur de Italia, tras días de espera.
Italia ha registrado hasta ahora más de 42.000 llegadas de migrantes, frente a los casi 30.000 durante el mismo período del año pasado.
Los partidos de extrema derecha, favoritos en las elecciones del 25 de septiembre, han prometido al abrir la campaña electoral frenar la migración.
El líder ultraderechista Matteo Salvini, del partido Liga, centrado en la lucha contra la migración, tiene previsto viajar el jueves a la pequeña isla de Lampedusa, punto de desembarco de la mayoría de los barcos de inmigrantes.
Las ONG han sido acusadas de ser un "factor de atracción" para los migrantes al proporcionar una red de socorro en el Mediterráneo, lo que niegan rotundamente.
"La eliminación de servicios adecuados de búsqueda y rescate europeos, con competencia en aguas internacionales, ha demostrado ser ineficaz para prevenir muertes y cruces peligrosos", explicó Xavier Lauth, director de operaciones de SOS Mediterranee.
(Y.Yildiz--BBZ)