El expresidente de Mauritania, acusado de corrupción, recobra la libertad
El expresidente de Mauritania, Mohamed Uld Abdel Aziz, recobró su libertad la madrugada del jueves tras permanecer más de un año en prisión preventiva y bajo vigilancia judicial, a la espera de un juicio por presunta corrupción, según un corresponsal de la AFP.
Hacia la medianoche (00H00 GMT del jueves), la policía comenzó a retirar las barreras que rodeaban su domicilio en la capital, Nuakchot, y los agentes asignados a su estricto control judicial comenzaron a alejarse.
Aziz, de 65 años y que dirigió Mauritania de 2008 a 2019, salió de su casa para saludar a las personas que habían acudido al lugar para celebrar su libertad.
"Su vigilancia judicial terminó la medianoche del miércoles y, como exige la ley, es libre de moverse, lo que no significa que su caso esté cerrado, ni mucho menos", insistió un fiscal a la AFP bajo condición de anonimato.
El exjefe de Estado fue inculpado en marzo de 2021 de corrupción, blanqueo de dinero, enriquecimiento ilícito, dilapidación de bienes públicos, otorgamiento de beneficios indebidos y obstrucción a la justicia.
En junio fue encarcelado en una prisión de Nuakchot por no haber respetado las medidas de su control judicial y por alteración del orden público.
En enero, fue trasladado a un hospital y puesto en libertad por motivos de salud, aunque siguió bajo supervisión judicial.
El expresidente afirma que su situación se debe a un "ajuste de cuentas".
(A.Berg--BBZ)