Berliner Boersenzeitung - Dar a luz, un riesgo mortal en Afganistán

EUR -
AED 4.100113
AFN 77.023391
ALL 99.447336
AMD 432.838798
ANG 2.014767
AOA 1036.468947
ARS 1074.711254
AUD 1.636359
AWG 2.00931
AZN 1.92827
BAM 1.957305
BBD 2.257155
BDT 133.59389
BGN 1.965384
BHD 0.42068
BIF 3230.523246
BMD 1.116283
BND 1.443523
BOB 7.725007
BRL 6.061866
BSD 1.117969
BTN 93.496501
BWP 14.707659
BYN 3.658545
BYR 21879.148453
BZD 2.253342
CAD 1.512678
CDF 3204.849171
CHF 0.945843
CLF 0.037658
CLP 1039.103456
CNY 7.8899
CNH 7.892758
COP 4648.481834
CRC 579.080293
CUC 1.116283
CUP 29.581502
CVE 110.791537
CZK 25.09505
DJF 198.385833
DKK 7.459342
DOP 67.201269
DZD 147.957368
EGP 54.174306
ERN 16.744246
ETB 128.657351
FJD 2.453423
FKP 0.850115
GBP 0.840299
GEL 3.047465
GGP 0.850115
GHS 17.524653
GIP 0.850115
GMD 76.468857
GNF 9658.645645
GTQ 8.64172
GYD 233.81355
HKD 8.700707
HNL 27.731566
HRK 7.589621
HTG 147.324568
HUF 394.065769
IDR 16940.712088
ILS 4.213405
IMP 0.850115
INR 93.347554
IQD 1462.33084
IRR 46987.14472
ISK 152.305694
JEP 0.850115
JMD 175.63501
JOD 0.791107
JPY 159.436514
KES 144.00081
KGS 94.074773
KHR 4543.271796
KMF 492.672047
KPW 1004.654143
KRW 1482.736164
KWD 0.3404
KYD 0.931512
KZT 535.361582
LAK 24653.111884
LBP 100018.964577
LKR 340.294632
LRD 216.83831
LSL 19.529721
LTL 3.296094
LVL 0.675228
LYD 5.325093
MAD 10.841334
MDL 19.50581
MGA 5036.894411
MKD 61.664335
MMK 3625.643914
MNT 3793.12987
MOP 8.973393
MRU 44.333165
MUR 51.204203
MVR 17.14598
MWK 1937.867679
MXN 21.522362
MYR 4.699547
MZN 71.274774
NAD 19.535528
NGN 1831.060868
NIO 41.137015
NOK 11.702609
NPR 149.612347
NZD 1.786209
OMR 0.429724
PAB 1.117969
PEN 4.180462
PGK 4.438412
PHP 62.045802
PKR 310.92129
PLN 4.272947
PYG 8726.786438
QAR 4.075633
RON 4.974608
RSD 117.069099
RUB 102.892984
RWF 1505.388617
SAR 4.18887
SBD 9.288327
SCR 15.203375
SDG 671.44267
SEK 11.337749
SGD 1.441813
SHP 0.850115
SLE 25.504058
SLL 23407.892397
SOS 638.896842
SRD 33.324404
STD 23104.806079
SVC 9.781519
SYP 2804.694667
SZL 19.535619
THB 37.004871
TJS 11.882003
TMT 3.906991
TND 3.375641
TOP 2.623048
TRY 37.953999
TTD 7.59799
TWD 35.642385
TZS 3041.24574
UAH 46.326211
UGX 4151.228228
USD 1.116283
UYU 45.925303
UZS 14242.075436
VEF 4043794.116249
VES 40.994414
VND 27438.238213
VUV 132.52737
WST 3.12276
XAF 656.485163
XAG 0.03591
XAU 0.000431
XCD 3.016811
XDR 0.828544
XOF 656.461621
XPF 119.331742
YER 279.433556
ZAR 19.537637
ZMK 10047.88601
ZMW 29.093234
ZWL 359.442698
Dar a luz, un riesgo mortal en Afganistán
Dar a luz, un riesgo mortal en Afganistán / Foto: Kobra Akbari - AFP

Dar a luz, un riesgo mortal en Afganistán

Bajo el cielo azul de Gardez, en el este de Afganistán, una autoridad de los talibanes preside la inauguración de una maternidad ante un público compuesto exclusivamente por hombres, pese a que esta clínica está gestionada por mujeres y sólo atiende a mujeres.

Tamaño del texto:

"No hay clínicas de este tipo en la mayoría de las provincias. Se respetan tanto los principios de la sharía (ley islámica) como de la medicina", afirma satisfecho Jair Mohamad Mansoor, director de Salud de la provincia de Paktiyá, cuya capital es Gardez.

El centro, inaugurado por la oenegé Norwegian Afghanistan Committee (NAC) en esta pequeña ciudad, ayudará a "muchas de nuestras hermanas que viven en zonas aisladas", explica a la AFP su directora, Nasrin Oryajil.

La oenegé noruega abrirá clínicas similares en otras cuatro provincias de Afganistán, un país donde cada dos horas una mujer muere durante el parto, según la ONU.

Las últimas cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS) reportan que la mortalidad materna es de 638 mujeres por cada 100.000 nacidos vivos, frente a 12 en los países de ingresos altos.

Y esta cifra oculta las enormes disparidades entre ciudades y las zonas rurales. "En las zonas remotas, se llega a 5.000 muertes" por cada 100.000 nacimientos, asegura Terje Watterdal, director del NAC.

"Hoy, todavía hay lugares donde los hombres atraviesan las montañas con sus mujeres embarazadas sobre los hombros y ellas mueren antes de llegar a un hospital", añade.

- "Mi madre murió en el parto" -

La maternidad de Gardez huele a pintura fresca y tiene una farmacia y un laboratorio nuevos y está concebida para atender hasta diez partos diarios.

"Todo el personal de salud es femenino", dice Oryajil, en referencia a los principios que rigen en este país de mayoría musulmana.

"Nuestros servicios son gratuitos", añade Momina Kohistani, jefa del equipo de matronas.

Las lágrimas resbalan sobre sus mejillas al contar su historia. "Mi madre murió en un parto cuando yo tenía tres años", murmura.

Antes del regreso al poder de los talibanes, en agosto de 2021, "en algunos distritos, las mujeres debían atravesar las líneas del frente para ir al hospital, así que esto es un cambio positivo", explica Watterdal.

"El cambio negativo es la fuga de cerebros, muchos ginecólogos huyeron" de Afganistán, donde cada mujer tiene en promedio seis hijos.

Los talibanes "quieren eliminar los equipos médicos móviles" que acuden donde están las pacientes "porque no pueden controlar los mensajes que les dan", especialmente en relación a la anticoncepción, cuenta.

Filipe Ribeiro, director de Médicos Sin Fronteras (MSF) en Afganistán, señala que "el acceso a cuidados prenatales y postnatales para las mujeres son aún más complicados actualmente".

Esto se debe "a la vez a las medidas tomadas por los talibanes" contra las mujeres, cada vez más confinadas en sus hogares, "pero también a los fallos del sistema de salud: el apoyo estructural de los donantes extranjeros se desplomó".

El ministerio afgano de Salud no respondió a las peticiones de comentarios de la AFP.

- Partos en casa -

Para la doctora Noor Janum Ahmadzai, coordinadora de salud de la oenegé Terre des Hommes (Tierra de hombres) en la capital Kabul, el deterioro del sistema de salud hace que los partos sean cada vez más peligrosos.

En un hospital público donde las matronas están desbordadas y tienen salarios bajos, las parturientas deben llevar sus propios medicamentos. Un parto cuesta unos 2.000 afganis (unos 28 dólares), una suma alta en este país.

Pese a los riesgos, "las mujeres que antes iban al hospital, ahora prefieren dar a luz en casa por falta de dinero", relata la doctora.

Cerca del 40% de las afganas dan a luz en sus hogares y esta cifra llega al 80% en zonas remotas.

En muchos casos los maridos y sus familias rechazan que la mujer sea hospitalizada, o la embarazada se avergüenza de exponer su cuerpo.

A 250 kilómetros al sur de Kabul, la oenegé MSF atiende 20.000 partos por año en la ciudad de Jost, es decir el 47% del total de los partos en la provincia del mismo nombre.

Este centro, que cuenta con un centenar de matronas, es poco común en Afganistán. Allí, Zubaida, cansada tras dar a luz el día anterior, todavía se recupera del parto.

"Si hubiese dado a luz en casa, podría haber habido complicaciones para el bebé o para mí", explica esta mujer, que dice que no sabe su edad.

Su bebé duerme en una cuna de hierro con la pintura descascarada, con los ojos cubiertos de kohl, un maquillaje que se cree que ahuyenta los males.

En esta provincia ultraconservadora, MSF recibe a muchas mujeres que nunca tuvieron un seguimiento de su embarazo.

- Decimocuarto embarazo -

"Nuestra misión es salvar vidas", explica Therese Tuyisabingere, deja del equipo de parteras de MSF en Jost.

"Pero muchas veces las mujeres llegan demasiado tarde, desde lejos. Dieron a luz en casa y tienen hemorragias graves", añade esta ruandesa.

"Solo atendemos los embarazos de riesgo o complicados", precisa Tania Allekotte, ginecóloga argentina de MSF.

Los embarazos múltiples, las cesáreas o haber sufrido varios abortos espontáneos incrementan el riesgo de muerte.

Islam Bibi, que tiene 38 años y ya tiene seis hijos, dio a luz a trillizos el día anterior.

Con voz apagada, explica que forma parte de los refugiados afganos expulsados de Pakistán.

"Estaba enferma, mi marido no tenía dinero. Me dijeron 've a este hospital, lo hacen todo gratis'", cuenta.

"En Afganistán se valora tanto tener hijos que muchas mujeres se someten a tratamientos para estimular su fertilidad", explica la doctora Allekotte, que hace poco atendió a una mujer en su decimocuarto embarazo.

"Tenemos muchos mellizos aquí", afirma.

(K.Lüdke--BBZ)