Berliner Boersenzeitung - La guerra, último trauma de un Líbano martirizado

EUR -
AED 3.981373
AFN 71.580898
ALL 98.817876
AMD 421.117102
ANG 1.959932
AOA 988.032315
ARS 1063.058201
AUD 1.615156
AWG 1.953844
AZN 1.846955
BAM 1.957811
BBD 2.195775
BDT 129.96352
BGN 1.957093
BHD 0.408581
BIF 3157.156182
BMD 1.083964
BND 1.427927
BOB 7.514443
BRL 6.128302
BSD 1.087477
BTN 91.424753
BWP 14.558352
BYN 3.558324
BYR 21245.687133
BZD 2.192071
CAD 1.495051
CDF 3083.876451
CHF 0.93861
CLF 0.037179
CLP 1025.874185
CNY 7.71555
CNH 7.725089
COP 4609.826324
CRC 559.45412
CUC 1.083964
CUP 28.725036
CVE 110.375341
CZK 25.23836
DJF 193.651806
DKK 7.458859
DOP 65.424801
DZD 145.108028
EGP 52.703176
ERN 16.259454
ETB 131.1506
FJD 2.446942
FKP 0.829415
GBP 0.832273
GEL 2.948138
GGP 0.829415
GHS 17.400234
GIP 0.829415
GMD 75.327894
GNF 9381.291852
GTQ 8.408328
GYD 227.395227
HKD 8.423319
HNL 27.074817
HRK 7.467458
HTG 143.171807
HUF 400.088839
IDR 16762.521959
ILS 4.049401
IMP 0.829415
INR 91.11912
IQD 1424.624185
IRR 45637.581533
ISK 149.207827
JEP 0.829415
JMD 172.590945
JOD 0.76842
JPY 162.526251
KES 139.831504
KGS 92.679273
KHR 4415.373278
KMF 493.040325
KPW 975.567022
KRW 1484.444899
KWD 0.332289
KYD 0.906298
KZT 530.28523
LAK 23852.625217
LBP 97384.206552
LKR 318.475439
LRD 209.336375
LSL 19.169787
LTL 3.200663
LVL 0.655679
LYD 5.227177
MAD 10.74194
MDL 19.297113
MGA 4974.904527
MKD 61.537128
MMK 3520.671585
MNT 3683.308442
MOP 8.708206
MRU 43.04144
MUR 50.285278
MVR 16.649795
MWK 1885.658983
MXN 21.464976
MYR 4.668092
MZN 69.270737
NAD 19.169787
NGN 1775.17491
NIO 40.019638
NOK 11.82008
NPR 146.279885
NZD 1.786882
OMR 0.417318
PAB 1.087477
PEN 4.09761
PGK 4.282241
PHP 62.475867
PKR 302.103229
PLN 4.308745
PYG 8543.46201
QAR 3.965027
RON 4.974418
RSD 117.025984
RUB 105.577553
RWF 1481.066947
SAR 4.071359
SBD 9.041193
SCR 14.763484
SDG 652.004653
SEK 11.417817
SGD 1.423462
SHP 0.829415
SLE 24.51914
SLL 22730.171856
SOS 621.51559
SRD 35.494931
STD 22435.858611
SVC 9.515513
SYP 2723.491428
SZL 19.268996
THB 35.922014
TJS 11.576473
TMT 3.793873
TND 3.363632
TOP 2.538746
TRY 37.062131
TTD 7.383313
TWD 34.821275
TZS 2953.801258
UAH 44.835101
UGX 3994.956869
USD 1.083964
UYU 45.354923
UZS 13922.918624
VEF 3926715.192322
VES 42.367364
VND 27380.921274
VUV 128.690372
WST 3.036382
XAF 656.604316
XAG 0.033864
XAU 0.0004
XCD 2.929466
XDR 0.812701
XOF 656.607347
XPF 119.331742
YER 271.397395
ZAR 19.103938
ZMK 9756.97178
ZMW 28.954679
ZWL 349.035846
La guerra, último trauma de un Líbano martirizado
La guerra, último trauma de un Líbano martirizado / Foto: Patrick Baz - AFP

La guerra, último trauma de un Líbano martirizado

"¿Cómo está usted?" En el Beirut de hoy, esta pregunta tan banal se responde con un silencio, una sonrisa cansada, a veces con lágrimas. Agotados por años de crisis, aturdidos por la guerra, los libaneses "ya no pueden más", comentan preocupados expertos en salud mental.

Tamaño del texto:

A muchos les marcó un dibujo del ilustrador libanés Bernard Hage: titulado "torta libanesa", representa una tarta de boda con varias capas: "hundimiento financiero, pandemia, explosión en el puerto, estancamiento político, depresión colectiva"... Y la guinda del pastel: la "guerra".

Es el resumen perfecto de lo que atraviesan los casi seis millones de libaneses desde la crisis económica de 2019, "un trauma continuo que nunca se detiene", explica la psicóloga Carine Nakhle, una responsable de la oenegé libanesa Embrace, que desde 2017 trabaja para luchar contra el suicidio.

Sus cerca de 120 operadores reciben llamadas de gente en apuros las 24 horas del día, los 7 días de la semana. Desde el 23 de septiembre, cuando el enfrentamiento entre Hezbolá e Israel se convirtió en una guerra abierta, las llamadas han aumentado, hasta alcanzar unas 50 al día de media.

"Gente conmocionada, en pánico, muchos de ellos llaman desde zonas bombardeadas, a veces simplemente para preguntar qué hacer", cuenta Nakhle.

Los bombardeos israelíes en el sur y el este de Líbano y en la periferia sur de Beirut, bastiones del movimiento Hezbolá, han dejado más de 1.100 muertos en los últimos quince días y obligado a más de un millón de personas a abandonar sus hogares, según las autoridades.

Beirut, donde se refugiaron decenas de miles de desplazados, cambió de fisionomía en solo unos días, con familias durmiendo en la calle, campamentos precarios y un tráfico aún mayor al habitual.

Cada noche, los incesantes bombardeos de Israel en el suburbio del sur de la capital provocan enormes explosiones, hacen temblar los cristales y dejan el aire impregnado de un horroroso olor a plástico quemado.

Y también despiertan traumas, viejos y no tan viejos: la espantosa explosión del puerto en 2020, la guerra de 2006 entre Israel y Hezbolá y la interminable guerra civil, que se alargó de 1975 a 1990.

- "¿Golpe de gracia?" -

La angustia se extiende más allá de las zonas de guerra, donde los civiles, aterrorizados, lo están pagando caro.

Rita Barotta, una profesora de Comunicación de 45 años, vive cerca de Jounieh, una ciudad cristiana "tranquila" al norte de Beirut. Allí no se siente la guerra pero, aún así, asegura que no tiene "palabras para definir lo que está pasando".

"Ya no sé ni cómo era el 'yo' que existía hace 15 días. Comer, dormir, cuidar de mis plantas, eso ya no existe", explica la mujer, que se ha volcado en la ayuda a los desplazados. "Es otro yo el que funciona. Lo único que existe ahora es cómo puedo ayudar".

Por teléfono, día y noche, encuentra alojamiento para personas que están en la calle, les indica en qué escuelas se pueden refugiar, busca medicinas...

"Si paro cinco minutos, tengo una sensación de vacío total", cuenta Barotta. Ponerse en acción es la única manera de no terminar "abrumada y petrificada".

Para ella, que casi perdió a su madre en la explosión del puerto y que aún recuerda muy vívidamente la guerra de 2006, "lo que ocurre hoy no es solo un trauma que se despierta, es un sentimiento de injusticia inmenso. ¿Por qué vivimos esto? No sé, ¿es esto el golpe de gracia?"

- Somníferos -

Según un estudio realizado en 2022 por la oenegé IDRAAC, pero publicado en septiembre, al menos dos tercios de los libaneses tendría algún trastorno mental.

Depresión, ansiedad, trastornos postraumáticos... "Todos estamos mal, de una forma o de otra", afirma, tajante, Rami Bou Khalil, jefe del departamento de Psiquiatría del hospital Hôtel-Dieu de France, en Beirut.

"Los libaneses tienen una muy fuerte capacidad de resiliencia", asegura, citando la importancia crucial del apoyo familiar, religioso o de la comunidad.

"Pero este fenómeno de acumulación de estrés hace que se colme el vaso... Desde hace años, movilizamos nuestros recursos físicos, psíquicos, financieros. La gente ya no puede más", agregó.

El médico también ha constatado un aumento del consumo de somníferos. "La gente quiere dormir", explica, y tomar una píldora es lo más sencillo cuando uno no tiene ni tiempo ni dinero para ir a consulta.

"Mucha gente no tiene acceso a los servicios de salud mental", apunta Carine Nakhle. Las consultas privadas cuestan unos 100 dólares, un coste que muchos libaneses no se pueden permitir.

"Así que la gente acude a las oenegés", señala. En el centro de salud de Embrace, la lista de espera es de cuatro a cinco meses.

(P.Werner--BBZ)