Derretimiento de carreteras de hielo aisla a indígenas en Canadá
El derretimiento de las vitales carreteras de hielo de Canadá tiene este viernes incomunicadas a varias comunidades indígenas del norte del país, en medio de un clima inusualmente cálido en pleno invierno que además llevó a su ciudad más grande, Toronto, a batir un récord de temperatura.
Las comunidades de las provincias de Ontario y la vecina Manitoba declararon el estado de emergencia, debido a que el calor hizo intransitable la red de carreteras construidas de hielo y nieve compactados que se extiende por más de 8.000 kilómetros entre poblaciones dispersas.
Muchos grupos remotos del norte de Canadá dependen de esas vías -erigidas sobre suelo helado, lagos y ríos congelados- para el suministro de productos básicos como combustible, alimentos no perecederos y materiales de construcción.
Además, permiten a los camiones llegar en invierno a zonas inaccesibles en otras épocas del año.
"Estamos muy preocupados", declaró a la AFP Raymond Flett, jefe de la primera nación de Saint Theresa Point, en el norte de Manitoba.
Las carreteras de hielo "son nuestro salvavidas. Es nuestro único acceso", advirtió.
La nación nishnawbe aski informó que 30 comunidades indígenas del norte de Ontario están aisladas y necesitan urgentemente ayuda federal.
"Las temperaturas invernales han sido significativamente más cálidas de lo normal, exacerbadas por los efectos del cambio climático", aseguraron los nativos en un comunicado, añadiendo que muchas carreteras de hielo se han vuelto inservibles para transportar grandes cargas y suministros críticos.
La oficina de la ministra de Servicios Indígenas, Patricia Hajdu, no respondió inmediatamente a una petición de comentarios de la AFP.
El representante indígena Victor Walker advirtió que la primera nación de Saint Theresa Point "se está quedando sin suministros y combustible" y necesita unos 300 camiones cargados de gasolina, alimentos y otros artículos de primera necesidad para pasar el resto del invierno.
La comunidad, de unos 5.000 habitantes, está considerando la posibilidad de enviar suministros por avión, pero supone un precio inasequible.
Peter Kimbell, meteorólogo de la agencia estatal Environment Canada, advirtió que, en medio de la emergencia, una ola de frío podría azotar Manitoba y Ontario la semana próxima.
Señaló que las rachas de calor durante esta época del año no son inusuales en Canadá, pero "es poco habitual ver esta tendencia continuada que hemos visto durante todo el invierno".
El viernes, Toronto batió un récord de calor en pleno invierno con una temperatura de 14,4ºC. El anterior máximo era de 10,6ºC en 1938.
Otras ciudades de la provincia de Ontario también rozaron nuevos niveles máximos de temperatura, incluida Ottawa, la capital del país.
El año pasado fue el más caluroso del que se tiene registro en el planeta, y el aumento de la temperatura de la superficie estuvo a punto de cruzar el umbral crítico de 1,5ºC, según el Servicio de Cambio Climático del monitor europeo Copernicus.
(T.Burkhard--BBZ)